Cuando hablamos de Nórdicos de Plumón, es conveniente saber una serie de factores para poder comprar esta pieza de cama que nos ayude a mantener el frío a raya, y que se convierta en nuestro gran aliado en invierno.
El plumón es un producto inequívocamente natural. El plumón debe de estar perfectamente limpio y procesado con los medios técnicos más avanzados para estar totalmente desinfectado con tratamientos germicidas y bactericidas. Esta garantía debe de estar reflejada en la etiqueta.
El plumón tiene que estar perfectamente identificado ya que este material de alta calidad evita que el Nórdico se apelmace, manteniéndolo suave y ligero durante mucho tiempo.
La funda del Nórdico tiene que estar perfectamente cosida para evitar que se salga el plumón, la calidad del tejido exterior es de mucha importancia, con lo cual es importante abrir el Nórdico y comprobar antes de comprarlo que está en perfecto estado.
Conservar los Nórdicos en lugares húmedos perjudica sensiblemente a la pluma y puede reducir el volumen.
Para mantenerlo siempre limpio hay que airearlo todos los días, al igual que aireamos la cama y cambiamos las sabanas de forma habitual. Así siempre aumentaremos la sensación de confort.
La vida de un Nórdico bien cuidado está entorno a los 20 años si seguimos el consejo de limpieza y cuidado de los especialistas en descanso. Cada fabricante te ofrece una garantía y es importante que las especifiquen en la compra.
Los Nórdicos nos han facilitado mucho la vida y son muy respetuosos con él medio ambiente, ya que su mayoría están hechos con tejidos naturales. Es muy importante que la bolsa en la que se conserva sea de algodón 100% aumentando la transpirabilidad y previniéndolo de bacterias y humedades.
La esponjosidad, gramaje adecuado, calidad en el tejido, costuras correctas y sobre todo la suavidad y ligereza harán que tu compra conlleve un descanso mas reparador dejando libertad de movimientos y repartiendo el calor de forma homogénea.
La forma en la cual nos aísla un plumón del frío, es que el plumón es un aislante térmico. Esto significa que el Nórdico siempre impide que el frío exterior penetre a través del tejido, manteniendo la temperatura corporal y evitando que se enfríe.
El tipo de cama no influye en el nórdico tanto si el colchón es de muelle ensacado, viscoelástico o látex la confortabilidad será la misma.
La diferencia entre la pluma y el plumón, es que el plumón es la parte ligera de las plumas de las aves , mientras que la pluma es la parte entera y contiene la caña que no cumple ninguna función y puede deteriorar el tejido externo del Nórdico.
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