Dormir más de 9 horas diarias, estar demasiado tiempo sentados y la falta de ejercicio, según alerta un estudio de la Universidad de Sídney. Se trata de un estudio sobre los problemas del sueño y como estos, se extienden a las personas que pasan demasiadas horas sentadas.
Esto nos suele pasar sobre todos los tentadores domingos que aprovechamos para dormir más horas que entre semana. Y esto no es nada bueno para nuestro reloj interno. Lo mejor para recuperar la falta de sueño perdido es tener una buena rutina diaria.
No obstante, el estudio también determina que dormir menos de 7 horas cada día, también multiplica el riesgo en nuestra salud si se combina con una mala alimentación, poco saludable y una vida sedentaria
La investigación demuestra que la salud está relacionada con el sueño y que se trata de un «problema» a nivel internacional, sobre todo en los países desarrollados.
Se debe tener como objetivo mentalizarnos de lo vital que resulta para la salud las ocho horas diarias de reposo absoluto, una meta cada vez más lejana en este mundo, 24/7 (24 horas/7 días a la semana) que se ha creado, de ahí el lema del pasado “Día mundial del Sueño” que decía «Dormir bien en un sueño alcanzable»,
Y lo peor es que el 60% de quienes padecen trastornos del sueño no hace nada por evitarlo y pagan todos los días una elevada factura personal…
Las consecuencias de una mala noche de descanso no sólo nos afectan físicamente, sino mental y emocionalmente. Estas son las cifras según un estudio del grupo de investigación Big Health,
El 60% sufre caídas de los niveles de energía.
El 48% padece cambios repentinos de humor
El 35% lo paga en sus relaciones personales.
El 46% tiene problemas de concentración
El 38% se siente incapaz de acabar las tareas
El 27% reconoce que se siente somnoliento en el trabajo.
Los pensamientos negativos, los horarios, el estilo de vida y un perfecto sistema de descanso en nuestro dormitorio son los cuatro pilares de un buen descanso.
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