Las tendencias en el diseño de interiores de los últimos años han tenido una clara inclinación hacia el minimalismo. En las habitaciones, por ejemplo, ha ido de menos a más, bien sea por cuestiones de espacio, bien de estética, colocar este accesorio directamente en el suelo sin hacerlo sobre un somier o una base.
A pesar de los posibles beneficios que esto pueda presentar en un primer momento, ¿es realmente ventajoso desde el punto de vista higiénico, práctico y para la salud de nuestro cuerpo? A continuación te daremos respuesta a esta pregunta para que puedas valorar los pros y los contras de dormir con el colchón en el suelo.
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Por qué no debes hacerlo
Son varias las razones que surgen desde el comienzo que te indican que esta puede no ser la mejor idea de todas. Antes de reseñarlas, primero hay que considerar la frecuencia con la cual acostumbras a hacer esta práctica: no es lo mismo optar por esta idea cuando un amigo se queda una noche en casa, que adoptarla de forma definitiva como una opción más en la decoración. Resumiendo las más importantes, estas son algunas razones por las cuales no deberías dormir con el colchón en el suelo.
Retiene mayor humedad
Este elemento tiene la cualidad de absorber un cierto grado de humedad (sobre todo aquellos que no cuentan con propiedades transpirables). Al estar en contacto directo con el suelo, este está expuesto también a mayores condiciones de frío que serán mayores o menores en función de la superficie de este (madera, mármol, granito y demás).
Así, las posibilidades de que en él se desarrollen hongos o moho son significativas altas. Este factor incide negativamente sobre éste sobre todo en la aparición de manchas y la pérdida de algunas propiedades que favorecen a tu comodidad al dormir.
Están expuestos más al polvo
Sin importar lo cuidadoso que seas con la limpieza en tu habitación, es inevitable que esté expuesto a mayor suciedad y polvo que si descansara sobre una base. Esto te afecta principalmente en dos sentidos: primero los episodios de congestión nasal, alergias, tos e irritación en las mucosas serán constantes, y segundo las sábanas y colchas se ensuciarán antes forzando a cambiarlas con mayor frecuencia.
No es una alternativa práctica
Sobre todo si consideras las jornadas de limpieza en tu habitación. Una actividad tan rutinaria como barrer o fregar puede ser todo un dolor de cabeza al estar levantando el colchón con mucha frecuencia. Por otro lado, cuando este descansa sobre la base de somier se genera un útil espacio entre el suelo que puede ser aprovechado para guardar aspiradoras, cajas de zapatos y demás. Si la base está integrada con un canapé o con compartimentos laterales, la premisa de ahorrar espacio con el colchón en el suelo tiene poco valor de razonamiento.
No contribuye a alargar su vida útil
En promedio, la vida útil de un colchón se suele encontrar entre los ocho y los diez años. Por supuesto, este rango está condicionado a las condiciones de preservación al cual han sido sometidos: aspirado, limpieza, ventilación, transpiración, postura y demás. Como se indicó, algunas de estas variables se complican un poco al carecer de una base que facilite su mantenimiento. Si se planeas dormir de esta forma durante un par de años, o ya lo estás haciendo, considera que estás reduciendo significativamente su vida útil.
Factores que debes tener en cuenta si decides poner el colchón en el suelo
Resumiendo el apartado anterior, podemos decirte que esta no es una buena idea si se prolonga durante muchos años, pero puede ser una alternativa admisible si se implementa de forma temporal. Sin embargo, esto no quiere decir que no debes tener en cuenta una serie consejos y recomendaciones que mejorarán la forma en que duermes en él y la propia integridad del colchón. Así, la próxima vez que decidas valerte de esta idea lo mejor es que consideres lo siguiente:
Valora la superficie donde lo colocas
Ten presente variables como las posibles irregularidades en el suelo (que pueden hacer malograr parte de su recubrimiento al moverlo) y la inclinación de este. Sobre este último punto, si no se encuentra en una superficie nivelada y uniforme, los problemas en la zona lumbar pueden presentarse exponencialmente al dormir.
Sitúalo cerca de un lugar ventilado
Ya se ha dicho que la humedad es un problema latente al colocar este objeto en el suelo, por lo que debes considerar situarlo en una zona ventilada y procurar que durante el día el aire corra libremente cerca de él. De no poder instalarlo en una por factores de estética o espacio, procura entonces abrir suficiente las ventanas aledañas a él para que durante el día pueda compensar aquello que durante la noche está expuesto.
Vigila quién duerme sobre él
Aunque técnicamente son diseñados para mantener sus propiedades sobre cualquier superficie, sin duda alguna un colchón sobre el suelo es ligeramente más incómodo que uno sobre un somier. Las personas mayores, los que sufren de dolores de espalda o los que padecen de episodios de insomnio no son los mejores candidatos para reposar sobre él. Por otro lado, si sufres de alergias estacionales, procura ser meticulosamente cuidadoso en su limpieza para evitar los inconvenientes de salud mencionados al comienzo.
No uses cualquier tipo de colchón
A pesar que este consejo bien puede aplicar para todas las personas, si planeas colocarlo directamente sobre el suelo tienes que asegurarte de elegir aquel que sea capaz de adaptarse a estas condiciones. El requisito de que sea un colchón transpirable debe estar como primero en la lista, seguidamente tienes que que escoger uno que cuente con las dimensiones y peso que lo hagan manipulables y por último aquel cuyas propiedades favorezcan tu comodidad a pesar de estar solo a un par de centímetros del suelo.
Para finalizar, recuerda que puedes optar por alternativas como las camas bajas o las finas superficies de madera que evocan a las tatamis japonesas. Al final, lo importante es que logres reunir dos requisitos principales: que puedas dormir a gusto en un espacio cómodo y que tu habitación luzca estéticamente acorde con tus gustos e inclinaciones personales de decoración.
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